Todo lo recordado va desapareciendo de a poco, se va evaporando de mi mente dejándola seca de felicidad perdida, a pesar de que algunos de estos flashback son dolorosos aun no me siento preparado para perderlos. Quizás sea porque me he convertido en un adicto al dolor psicológico, cada vez necesito una dosis mas fuerte para poder seguir adelante y sentirme tranquilo.
El dolor me invade al saber que es inevitable que estos recuerdo se pierdan, con esto, ya solo me queda saborear lo poco que me queda y mirar asía adelante, saber que me esperan mas cosas (dolores) que me puedan seguir alimentado esta adicción.
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